09 octubre, 2007

HEROES

No me apetecía nada estudiar el descubrimiento de América. Por eso he tardado más de un mes en volver a escribir, es el Tema 1 de Moderna. El caso es que después de unas pocas páginas, estoy enganchadisima. Supongo que estoy imaginando esos viajes de meses en barco con las caras de los actores de "Lost", musculitos torrados al sol con poca ropa, y en situaciones que superan de lejos cualquier trama planteada por la Fox.


Por partes. Más allá de la vida tan desgraciada que tuvo Cristobal Colon (otro día la cuento, pobre, pobre), me he hecho fan de Juan Sebastián Elcano, un tipo de Guetaria (Guipuzcoa) que para quien sepa menos que un niño de primaria, fue el primero en dar la vuelta al mundo.


Situemonos. Esta gente no tenia móvil, ni neopreno, ni previsión metereológica. Por supuesto, no tenían ni idea de si la ruta que seguian les llevaría algún día a tierra firme. Confiaban que el tipo que hacía de jefe sí lo supiera, pero los almirantes de esa época sólo tenían descripciones de las costas chinas al estilo "gran bahia de arena blanca con quince palmeras", "playa con rocas y desembocadura de rio a la derecha"... la gran mayoria de esos marineros no lo contaron. Algunos naufragaron, otros fueron devorados por los nativos, y otros llegaron a tierras muy, muy lejanas y se quedaron allí mientras veían zarpar las naves de vuelta a España, con sus compañeros despidiéndoles con la manita...


Juan Sebastián Elcano, saldrá de España como segundo de a bordo en la expedición de Magallanes, con la misión de llegar a las Indias. Por entonces, todavía no se había aclarado qué era la tierra que habían descubierto, y la mayoría pensaba que estaban en China y la India estaba a tiro de piedra.

Todo empezó cuando en 1519, 27 años después de haber mandado a Colón, ni los Reyes Católicos ni el recién nombrado rey Carlos I habían visto un duro de estas expediciones. En cualquier otro momento de la historia, el que manda o los mandados que pagan impuestos se habrían mosqueado y se habría abandonado el proyecto. El caso es que el pique con los portugueses por el dominio de los mares era tan grande que los españoles echaron el resto y montaron una super expedición fichando al almirante de moda, Magallanes, el equivalente al Mourinho de hoy, para ver si esto de los barquitos les traía pasta de una vez.


Así, el 20 de Septiembre partieron 234 hombres en 5 barcos. Por la ruta habitual de Colon, llegaron a Centro America y comenzaron a bajar por la costa hacia el sur. Después de semanas sin saber de verdad dónde estaban y con poca comida, empezaron los motines a bordo, enfrentamientos con los españoles asentados ya en esas tierras y algún que otro problemilla con unos caníbales en el Amazonas.

Los que se aún seguian con vida y algo de locura, casi se matan intentando dar la vuelta al Cabo de Hornos, que es un laberinto de islotes de cuidado. Cuando lo consiguieron, Magallanes y los que aguantaban iniciaron la ruta hacia el norte por la costa de Chile, virando después hacia el oeste. Las corrientes y bastante potra les llevaron a Filipinas antes de que todos palmasen de escorbuto, y ¡mira que los pobres desgraciaos estuvieron rodeados de islas paradisiácas casi todo el tiempo! Cuando llegaron a tierra ya no tenían agua, las galletas de viaje estaban estropeadas y casi todos los marineros enfermos.


En Filipinas, tuvieron a bien cristianizar lo que se convirtió en la corte del rey Carlos, e instalaron un gobierno a la europea. Al poco tiempo, los nativos provocaron una rebelión a la europea y con mucha prisa y muchas bajas, los chicos -que quedaban- de Magallanes volvieron a embarcarse, siempre hacia el oeste.


Sobrevivieron durante semanas como piratas, y en una de las incursiones a tierra, Magallanes murió, con lo que Juan Sebastián Elcano se convirtió en el jefe de la expedición.


A estas alturas, les habría subido algo el ánimo que por fin llegaran a la India para poder llevarse un buen lote de especias. Cargaron los barcos de pimienta y de otras sustancias (hoy ilegales en España), pero al volver a embarcar se dieron cuenta de que lo que necesitaban eran más galletas y agua para sobrevivir la travesía, así que lo de hacerse ricos quedó aplazado para un poco después.

Ahora el problema vino con los portugueses, hasta entonces los únicos que sabían llegar a la India por mar. Cuando se enteraron de que un barco español había llegado a Goa por otra ruta, pusieron orden de búsqueda y captura (y sablazo) para Juan Sebastián Elcano y sus chicos. Los pobres tuvieron que rodear todo Africa de vuelta sin parar apenas en tierra, o los portugueses, con bases en toda la costa, se los cargaban.


El 6 de Septiembre de 1522, 18 hombres de los 234 que partieron, llegaron a San Lucar de Barrameda (Cádiz) medio muertos, sin especias ni riquezas, a bordo del último barco, el Victoria. Una placa en el ayuntamiento de esa localidad recuerda sus nombres. Me apetece copiarlos también aquí (cortesía de Wikipedia)

Juan Sebastián de Elcano, de Guetaria (Capitán)
Francisco Albo, de
Axila (Piloto)
Miguel de
Rodas (Piloto)
Juan de Acurio, de
Bermeo (Piloto)Antonio Lombardo (Pigafetta), de Vicenza (Sobresaliente)
Martín de Yudícibus, de
Savona (Marino)
Hernando de Bustamante, de Alcántara (Marinero y barbero)
Nicolás el Griego, de
Nápoles (Marinero)
Miguel Sánchez, de Rodas (Marinero)
Antonio Hernández Colmenero, de
Huelva (Marinero)
Francisco Rodriguez, portugués de Sevilla (Marinero)
Juan Rodríguez, de Huelva (Marinero)
Diego Carmena (Marinero)
Hans de
Aquisgrán (Cañonero)
Juan de
Arratia, de Bilbao (Grumete)
Vasco Gómez Gallego el Portugués, de
Bayona (Grumete)
Juan de Santandrés, o de Santander, de
Cueto (Grumete)
Juan de Zubileta, de
Baracaldo (Paje)

Los primeros en dar la vuelta al mundo.