Histeria: *(del francés hystérie, y éste del griego ὑστέρα, «útero») afección psicológica que pertenece al grupo de las neurosis y que padece el uno por ciento de la población mundial. *Hasta el siglo XIX, enfermedad que causa trastorno en el comportamiento psicológico por falta de sexo.
09 octubre, 2007
HEROES
Por partes. Más allá de la vida tan desgraciada que tuvo Cristobal Colon (otro día la cuento, pobre, pobre), me he hecho fan de Juan Sebastián Elcano, un tipo de Guetaria (Guipuzcoa) que para quien sepa menos que un niño de primaria, fue el primero en dar la vuelta al mundo.
Situemonos. Esta gente no tenia móvil, ni neopreno, ni previsión metereológica. Por supuesto, no tenían ni idea de si la ruta que seguian les llevaría algún día a tierra firme. Confiaban que el tipo que hacía de jefe sí lo supiera, pero los almirantes de esa época sólo tenían descripciones de las costas chinas al estilo "gran bahia de arena blanca con quince palmeras", "playa con rocas y desembocadura de rio a la derecha"... la gran mayoria de esos marineros no lo contaron. Algunos naufragaron, otros fueron devorados por los nativos, y otros llegaron a tierras muy, muy lejanas y se quedaron allí mientras veían zarpar las naves de vuelta a España, con sus compañeros despidiéndoles con la manita...
Juan Sebastián Elcano, saldrá de España como segundo de a bordo en la expedición de Magallanes, con la misión de llegar a las Indias. Por entonces, todavía no se había aclarado qué era la tierra que habían descubierto, y la mayoría pensaba que estaban en China y la India estaba a tiro de piedra.
Todo empezó cuando en 1519, 27 años después de haber mandado a Colón, ni los Reyes Católicos ni el recién nombrado rey Carlos I habían visto un duro de estas expediciones. En cualquier otro momento de la historia, el que manda o los mandados que pagan impuestos se habrían mosqueado y se habría abandonado el proyecto. El caso es que el pique con los portugueses por el dominio de los mares era tan grande que los españoles echaron el resto y montaron una super expedición fichando al almirante de moda, Magallanes, el equivalente al Mourinho de hoy, para ver si esto de los barquitos les traía pasta de una vez.
Así, el 20 de Septiembre partieron 234 hombres en 5 barcos. Por la ruta habitual de Colon, llegaron a Centro America y comenzaron a bajar por la costa hacia el sur. Después de semanas sin saber de verdad dónde estaban y con poca comida, empezaron los motines a bordo, enfrentamientos con los españoles asentados ya en esas tierras y algún que otro problemilla con unos caníbales en el Amazonas.
Los que se aún seguian con vida y algo de locura, casi se matan intentando dar la vuelta al Cabo de Hornos, que es un laberinto de islotes de cuidado. Cuando lo consiguieron, Magallanes y los que aguantaban iniciaron la ruta hacia el norte por la costa de Chile, virando después hacia el oeste. Las corrientes y bastante potra les llevaron a Filipinas antes de que todos palmasen de escorbuto, y ¡mira que los pobres desgraciaos estuvieron rodeados de islas paradisiácas casi todo el tiempo! Cuando llegaron a tierra ya no tenían agua, las galletas de viaje estaban estropeadas y casi todos los marineros enfermos.
En Filipinas, tuvieron a bien cristianizar lo que se convirtió en la corte del rey Carlos, e instalaron un gobierno a la europea. Al poco tiempo, los nativos provocaron una rebelión a la europea y con mucha prisa y muchas bajas, los chicos -que quedaban- de Magallanes volvieron a embarcarse, siempre hacia el oeste.
Sobrevivieron durante semanas como piratas, y en una de las incursiones a tierra, Magallanes murió, con lo que Juan Sebastián Elcano se convirtió en el jefe de la expedición.
A estas alturas, les habría subido algo el ánimo que por fin llegaran a la India para poder llevarse un buen lote de especias. Cargaron los barcos de pimienta y de otras sustancias (hoy ilegales en España), pero al volver a embarcar se dieron cuenta de que lo que necesitaban eran más galletas y agua para sobrevivir la travesía, así que lo de hacerse ricos quedó aplazado para un poco después.
Ahora el problema vino con los portugueses, hasta entonces los únicos que sabían llegar a la India por mar. Cuando se enteraron de que un barco español había llegado a Goa por otra ruta, pusieron orden de búsqueda y captura (y sablazo) para Juan Sebastián Elcano y sus chicos. Los pobres tuvieron que rodear todo Africa de vuelta sin parar apenas en tierra, o los portugueses, con bases en toda la costa, se los cargaban.
El 6 de Septiembre de 1522, 18 hombres de los 234 que partieron, llegaron a San Lucar de Barrameda (Cádiz) medio muertos, sin especias ni riquezas, a bordo del último barco, el Victoria. Una placa en el ayuntamiento de esa localidad recuerda sus nombres. Me apetece copiarlos también aquí (cortesía de Wikipedia)
Juan Sebastián de Elcano, de Guetaria (Capitán)
Francisco Albo, de Axila (Piloto)
Miguel de Rodas (Piloto)
Juan de Acurio, de Bermeo (Piloto)Antonio Lombardo (Pigafetta), de Vicenza (Sobresaliente)
Martín de Yudícibus, de Savona (Marino)
Hernando de Bustamante, de Alcántara (Marinero y barbero)
Nicolás el Griego, de Nápoles (Marinero)
Miguel Sánchez, de Rodas (Marinero)
Antonio Hernández Colmenero, de Huelva (Marinero)
Francisco Rodriguez, portugués de Sevilla (Marinero)
Juan Rodríguez, de Huelva (Marinero)
Diego Carmena (Marinero)
Hans de Aquisgrán (Cañonero)
Juan de Arratia, de Bilbao (Grumete)
Vasco Gómez Gallego el Portugués, de Bayona (Grumete)
Juan de Santandrés, o de Santander, de Cueto (Grumete)
Juan de Zubileta, de Baracaldo (Paje)
Los primeros en dar la vuelta al mundo.
26 septiembre, 2007
PRIMOS LEJANOS
Más o menos son como los primos de nuestros abuelos: tenemos antepasados comunes, pero ni idea de qué ha sido de ellos y de sus hijos.
En nuestra evolución desde el Australopitecus hasta el Homo Sapiens, el tamaño del cráneo se iba agrandando en cada nuevo paso. El del Neandertal llegó a casi 1800 cc de capacidad en el 150 000 aC. Nosotros aparecimos 50 000 años más tarde que ellos, ¡con casi un tercio menos de cerebro!
Los restos que tenemos hasta ahora nos confirman que desaparecieron de su último reducto (¡en Asturias!) hacia el 29 000 aC, y nadie sabe por qué. Lo bueno de la prehistoria es que admite todo tipo de teorias. Hasta que no se invente la máquina del tiempo, la sensación al estudiarla es la de ver un capítulo de CSI sin final: Si los Neandertales tenían más cerebro, serían más inteligentes que nosotros. Quizás podían mover cosas con la mente, o comunicarse por telepatía como se le ocurrió a Jean M. Audel al escribir "El Clan Del Oso Cavernario". Quizás se fueron con los extraterrestres o eran extraterrestres como sugiere J.J. Benítez. Quizás eran tipos inteligentes con falta de litio y decidieron suicidarse en masa. Quizás tener más cerebro no es tan bueno después de todo. ¿Y la gripe aviar? ¿Y el mal de las vacas locas?... Quién sabe.
Hoy por hoy, está aceptado que las leyendas tienen cierta base cuando menos, probable, y está comprobado que los Neandertales convivieron con nosotros, los Homo Sapiens. Si es así, no veo por qué no podríamos concebir una especie de Shreck Neandertal que inspirara las historias de Ogros, Big-foots y Basajaunes: tipos toscos bastante bestias que, apartados en los montes y con preferencia por climas fríos, atemorizaban ocasionalmente a las tribus de Sapiens.
Quizás nunca inventemos una máquina del tiempo, pero la arqueología está dándonos nuevas noticias a diario. Acabamos de confirmar que tenemos otros primos "Hobbits", recién descubiertos en la Isla de Flores, en Indonesia. Aunque sea en un artículo pequeñito entre los resultados de petanca regional, espero noticias de la familia.
06 septiembre, 2007
LOS MÁS BESTIAS DEL MUNDO
El término Almogávar es un palabro morisco, cuya traducción aproximada es "esos gamberros que nos tocan las narices". Fundamentalmente eran pastores de Navarra, Aragón y Cataluña, que se dieron cuenta de que les iba mejor atacando -y saqueando- moritos que cuidando ovejas.
Los Almogávares tuvieron una carrera meteórica en el siglo XIII. Ganaron tanta fama en el reino de Aragón, que el rey Jaime I les contrató para recuperar Valencia en la reconquista. Lo consiguieron, pero la ansiada paz sólo llegó cuando Jaime I, después de ganar la batalla, apartó de sus tropas a estos pastores camorristas.
Su destino -y el dinero de Jaime I- les llevó en un primer momento a Sicilia. Allá la dinastía francesa de los Anjou pretendía reinar con ayuda del Papa, pero a los Sicilianos, como a casi toda Europa, no les gustaban los gabachos.
Esto lo aprovechó el hermano del rey de Aragón, Federico, que como pariente de la anterior dinastía (impronunciables Hohenstaufen) reclamó sus derechos sobre el trono de Sicilia. Con ayuda de los Almogávares, Federico expulsó a los Anjou en el 1302 y se proclamó rey.
Muy pocas veces se cuenta el "qué pasó después" de las batallas, y no quiero ni pensar los líos que tendrían en una isla tan pequeña con 2500 bestias como los Almogávares, más mujeres, más hijos (unos 7000 en total). Federico de Sicilia sí lo pensó, y encontró la solución cuando en 1304, el emperador Andrónico II de Constantinopla pidió ayuda contra los turcos.
Para dirigir a los Almogávares rumbo a Bizancio, se contrató al templario Roger de Flor (que como podéis leer en un blog anterior, en esos años podría sentir ya las brasas en sus pies) y al grito de "Desperta Ferro!" los Almogávares vencieron a 13,000 turcos y otros 3,000 genoveses. Estos datos documentan que cada Almogavar podía por lo menos con 6,4 oponentes. No está nada mal.
El problema vino cuando en agradecimiento, el Emperador de Bizancio otorgó el título de Megadux a Roger de Flor y le prometió a una de las damas de la corte de Constantinopla. Esto no les hizo gracia a otros cortesanos bizantinos, entre ellos el hijo del emperador, así que mataron a Roger de Flor, suponiendo que los Almogavares se sentirían indefensos sin su líder.
Nada más lejos de la realidad. Aquellos pastorcillos de los Pirineos, no sólo no se sintieron amedrentados, sino que su furia les llevó a conquistar y saquear todo lo que encontraron en su camino. Lo llamaron la "Venganza Catalana".
Al final se encontraron con el ejército de Bizancio, que quiso hacer algo para frenar tanto gamberrismo, pero 26,000 bizantinos y 8,700 mercenarios alanos no pudieron hacer nada: según mis cálculos, los Almogávares vencieron a 13,8 oponentes cada uno.
No me explico cómo a estas alturas, muy poca gente se acuerda de que gracias a estos pastores aventureros, Atenas, la cuna de la democracia, la gloriosa patria de Pericles, la Acrópolis y hasta los escupideros del Partenón fueron de la Corona de Aragón durante casi un siglo, y hoy todavía, el Rey de España es Duque de Atenas y Neopatria.
Y todo esto, sin poción mágica. Larga vida a los Almogávares.
05 septiembre, 2007
MALDITOS BANCOS
Después de luchar en las cruzadas, estos monjes guerreantes lo tenían tan bien montado que decidieron meterse en lo que realmente les iba a sacar de pobres: ser banqueros, y a ser posible, de los tipos más ricos. En ese momento, Francia era el TOP 1 del Forbes. Su rey, Felipe IV (también Felipe I de Navarra) contra todo pronóstico no pudo devolver el dinero que le habían prestado los Templarios, y un poco harto de lo pesaditos que eran, optó por quitárselos de encima. Es lo que tiene ser rey, que puedes hacer lo que te da la gana.
Comenzó por hacer circular rumores de que blasfemaban, abusaban serrrsssualmente de los miembros más jóvenes, y adoraban al diablo. Coincidió que justo entonces los papas de Roma estaban promoviendo la Inquisición. Por un simple A+B, Templarios a la hoguera, y nos olvidamos de las deudas y el euribor.
Se dice que el Gran Maestre de la Orden, Jacques de Molay, maldijo a Felipe IV y a sus generaciones venideras mientras sus entrañas se chamuscaban, allá por 1314. Es probable que a Felipe IV esta maldición se la soplara bastante, más cuando recibió parte de la pasta de los Templarios, pero los años acabaron por cobrase sus deudas, con bastantes intereses. Tomo por ejemplo lo qué fue de sus hijos:
-A su primogenito le envenenaron poco después de que ardiese el último templario
-Su segundo y tercer hijo, muerte prematura
-Su cuarto hijo, asesinado
-Su quinta hija, Isabel “La Loba”, se casó con el rey de Inglaterra, Eduardo II. El tema no funcionó (ella era guapísima, pero a él las mujeres le daban repelús), así que Isabelita se buscó un rollito con Roger Mortimer y le metió una espada al rojo por el recto a su marido. Su hijo, Eduardo III se mosqueó bastante y ordenó matar al amante de su madre. Isabel terminó sus días en un convento. Pobre maldita monja.
-Sus otros dos hijos murieron uno detrás de otro, en cuanto se pusieron la corona.
Felipe IV murió en un accidente de caza, y Enrique III de Inglaterra, hijo de Isabelita, reclamó el trono francés. Esto desencadenó la guerra de los 100 años, y a los 98, Inglaterra ya la había perdido.
Para no repetir los errores del pasado, recordemos: por muy horribles que se pongan las cosas para los bancos, debemos ser prudentes porque nunca, nunca, nunca nos libraremos de ellos. Ahora bien, si son los americanos los que se ocupan de las cerillas…
AKHENATON
Amenhotep IV no habia sido educado para ser faraón. Le hubiera correspondido a su hermano, pero ironías de la vida, se murió casi a la vez que su padre. Amenhotep era un tipo afeminado, interesado en la poesía y sobreprotegido por su madre, Tiyi. Si habéis visto relieves de un faraón escuálido, con una enorme nariz y los ojos super alargados, seguro que se trataba de Amenhotep IV: fue el único faraón que se quiso representar de forma natural, y no con la pose habitual de los faraones porque-yo-lo-valgo. Además, fue el único que retrató a su familia con una actitud más entrañable, rodeados de florecitas, los niños jugando… y a su madre con una buena mala leche.
El caso es que se le ocurrió que todo el pueblo egipcio tendría que adorar a un dios sobre todo el resto, y este era Aton, el disco solar. Tradicionalmente se le ha considerado un idealista sensibilero, pero con todo este lío del nuevo dios, se quitó de un plumazo al clero tradicional y pudo elegir a los nuevos sacerdotes, que entiendo que estarían super agradecidos y super dispuestos a hacer lo que el faraón dijera.
Fue mucho más lejos: cambió su nombre a Akhenaton, construyó una nueva ciudad para el Dios: Akhetaton, mandó construir monumentos, estatuas y relieves y escribió poesías a este dios que llegaba por igual a ricos y pobres, a jóvenes y ancianos… Podría pensarse que después de siglos de dioses clasistas, las masas deberían haber abrazado esta fe al minuto, pero no fue así. Supongo que a nadie le haría gracia renovar el altar del salón y traicionar a la Santa Rita y el San Antonio de entonces.
Está confirmado que entre otras, se casó con Nefertiti de la que todo el mundo recuerda el busto porque era muy mona (por cierto, el famoso busto está en Berlin, otro día comento el dato) aunque que todavía no se sabe si era una noble local, una prima suya, o una princesa mitannia como estaba de moda allí por entonces.
Cuando murió Akhenaton se hizo un lío del quince. Primero reinó Nefertiti, pero con el nombre artístico-real de Anjjeperura-Semenjkara, y luego heredó la corona un hijo de Akhenatón y su tercera esposa, que se casó con una hija de su padre y Nefertiti. Sí, una medio hermana, muy fuerte para nuestros oídos, pero como sólo tenían 10 años, no abrían llegado a más que pasear de la mano, digo yo.
El caso es que a este pobre crío, los sacerdotes de Amon, bastante cabreados por haber sido dejados de lado, se lo comieron con patatas y volvieron a poner de religión oficial el culto a Amon. Luego llegó al trono el general Horemheb, y el muy traidor, habiendo estado antes al lado de Akhenatón, destruyó toda su obra cuando le coronaron faraón. Su intención era que la historia le recordase como heredero directo de Amenhotep III.
Por encima de mi cadaver.
21 agosto, 2007
HEREJES!
Siempre me han fascinado esos personajes de la historia que mueren por una idea.
Están los mártires cristianos, que como son santos, las monjas del cole tuvieron a bien inculcarnos su ejemplo. Aún tengo pesadillas. Luego están los mártires de otras religiones (que según las monjas estaban pirados), después los que se mueren cuando inventan el propulsor-volador (sobre estos no voy a comentar nada) y por último, los Herejes.
A partir de aquí, los Herejes se pueden clasificar en varios subgrupos:
Grupo 1, los que desde sus tumbas pueden decir “te lo dije” como Galileo o Miguel Servet (para los despistados de la sala, uno dijo que el sol no da vueltas alrededor de la tierra y el otro fue a la hoguera por decir que la sangre circulaba). Este grupo en realidad mola bastante porque nos acordamos de ellos y nos sentimos fatal -o echamos la culpa al Vaticano y nos sentimos un poco mejor.
Grupo 2 es el de los herejes que todavía tienen club de fans, como Lutero. Este mola aún más porque tienen iglesias y les dedican canciones.
El Grupo 3 es el más triste de todos, porque ni les recordamos ni nadie les va a pedir perdón por haber sido tan bestias con ellos. Como representantes del grupo 3 me gustaría hacer unas cuantas menciones especiales:
Pelagio-----
No se sabe mucho de él, pero vivió en Roma y la montó por decir que los bebés nacen sin pecado -y así el bautismo era un paripé. Inocencio I (es curioso que ya llevo dos blogs con papas Inocencios de prota) le excomulgó porque en el bautismo no sólo se lavan los pecados de los bebés, sino que además los bebés reciben la gracia de Dios y sin esta gracia es imposible esperar que sean buenas personas cuando crezcan.
Ahora entiendo por qué nos hemos cargado a todos los Indios, muchos Moros, parte de los Judíos y tantisimas focas.
Donato----------
Este curita del siglo III pensaba que para administrar sacramentos, los sacerdotes tenían que vivir siendo hombres buenos sin cometer pecados. Esto también implicaba estar lejos del poder político y los lujos.
Le excomulgaron, y hasta San Agustín lo puso verde, pero no llegaron a quemarle ¡Habrase visto!
Dulcino---------
Me da mucha pena. En realidad fue lo que se llama un “fruto de su tiempo“. Nació en el 1250, cuando la iglesia llevaba ya más de dos siglos diciendo que había que ir a las cruzadas y mandar mucha pasta al Papa porque el mundo se iba a acabar. El pobre se lo creyó y como no tenía nada para mandar al papa ni posibilidad de ir a las cruzadas, se refugió con su cuchipandi en un fortín italiano, a esperar el fin del mundo como los de Waco. No se llegaron a suicidar como esos piraos yanquis (vease Grupo 4: piraos, del todo piraos), pero como el mundo no se acababa y les entró hambre, les dio por saquear a los pueblos cercanos, así que sus vecinos se enfadaron un poco y les quemaron vivos.
Prisciliano ------
Mi favorito. Fue acusado de Hereje por pedir a la Iglesia que se tomara en serio lo del voto de pobreza, por condenar la esclavitud y por hacer que las mujeres participasen en la misa (dejándoles entrar al templo, nada más). Prisciliano tuvo bastante éxito por las plazas de Hispania del siglo IV, pero ni el emperador ni el papa (Inocencio otra vez) eran fans, así que decapitaron a Prisciliano y desterraron a sus seguidores.
Quiero cerrar este blog diciendo que sé que he simplificado estas historias hasta el infinito, y que si me parara a pensar en la Trinidad, la naturaleza y entidad de Dios y el sentido de la riqueza en el hombre en serio, no sería tan irreverente. También confieso que encontraría mucho más sentido a eso de matar Herejes después de dos o tres copas con una cuadrilla de Latin Kings.
Una cosa más: me gustaría dedicarlo a Ayma, que lleva meses tratando de apostatar sin que el Arzobispado de Madrid le deje hacerlo. Espero que entre estas líneas encuentre inspiración. Quizás consiga que la excomulguen. (Pero por favor, no digas nada de las mujeres, ni de los bebés, ni de los esclavos, ¡que no veas cómo se ponen!).
16 agosto, 2007
"Viam Agnoscere Veritatis", para mongoles
Situándonos… año 1248 de nuestra era, el Imperio Mongol se ha convertido en uno de los más grandes dominios de la historia. Desde China hasta el Adriático, se dice pronto. Y su mayor mérito es que los Mongoles eran nómadas, o sea, en teoría ¡mucho más retrasados que los pueblos que acaban de conquistar! El miedo, el desconocimiento y la absoluta desorganización de los pueblos conquistados han ayudado bastante.
Ahora, tras la muerte de Gengis Khan, en 1226, el Imperio se sigue extendiendo. El Imperio comprende kilómetros y kilómetros y pueblos muy diferentes. Las claves del mantenimiento son el potentísimo aparato militar (son nómadas, así que pueden estar sitiando una ciudad durante meses, qué más da acampar en un sitio que otro), y su servicio de correos. En el amasijo de culturas que gobiernan, la religión es una de sus preocupaciones más ínfimas, y si se declaran “tolerantes” con todas las religiones, la realidad es que simplemente “pasan“.
Y ahora viene, cómo no el Papa, Inocencio IV y ve miles, millones de personas bajo el mando de un único poder. En este momento el Papa está un poco subidito cual Sauron encargando anillos, porque ya tiene bastante poder político en los estados pontificios y su influencia sobre las monarquías europeas (que muchas veces se legitiman sobre Dios), es indiscutible. Cobra rentas de sus dominios y parte de lo que recauda cada iglesia o parroquia, además de las donaciones para cruzadas, bulas etc etc. Por si fuera poco, las órdenes mendicantes (Dominicos y Franciscanos), se han lanzado a labores misioneras en esas tierras del este, lo que podría llamarse trabajar de gratis para el Vaticano, e intentan cristianizar lo incristianizable.
La gran ocurrencia del Papa en este momento es enviar un embajador a Karakorum, a hablar con el Gran Khan y mandarle la epístola “Viam Agnoscere Veritatis”, que básicamente ofrece al Khan descubrir la verdad de Dios y sucumbir a los encantos del cristianismo, entre ellos, la autoridad del Papa y el pago de rentas y donaciones al Vaticano.
Me imagino a este tipo Mongol, que desde que nació ha estado luchando por ampliar territorios y someter a más pueblos, que ha aprendido que la autoridad máxima sobre todas las cosas es el Khan, va y cuando llega a ser Khan, un tipo de ojos redondos le dice que lo que de verdad mola es que un tal Inocencio le diga lo que hay que hacer y cómo hacerlo. ¿Habría levantado una ceja?
HONORIA, rebelde porque el mundo le hizo así
Justa Grata Honoria nació en el 419 dC, diez años después del primer gran saqueo de Roma de Alarico (que se lió una buena… bárbaros entrando en la capital!). El Imperio Romano de Occidente llevaba poco más de 20 años de historia y no ganaba para disgustos.
La madre de Honoria, Gala Placidia, se merece un blog aparte. Para dar un par de pinceladas, fue secuestrada durante el saqueo de Alarico y acabó enamorada de Ataulfo, el heredero godo. Como rey godo que se precie, Ataulfo tiene una estatua en la Plaza de Oriente de Madrid. No sé en qué modelo se habría basado el escultor, pero parece que estaba bastante bueno… bueno, que me lío, que después de que asesinaran a los hijos que tuvo con Ataulfo y salvarse ella por los pelos, Gala Placidia volvió a Roma, donde su encantadores parientes le hicieron casi tantas barbaridades como sus cuñados bárbaros.
En este ambiente familiar, es de cajón que la niña Honoria acabara un poquito tocada. Tampoco ayudó su proceso de educación como casta devota en Constantinopla. Estaba bastante salida. Si su vida entre rezos y contemplación ya le generaba cierta mala leche, su cabreo se hizo monumental cuando le prometieron a un tipo llamado Constancio, que estaba muy bien situado en Roma, pero no era su tipo.
En el apogeo de su pataleta, Honoria encontró un plan para vengarse de su familia: uhmm… ¿no hay un tal Atila por ahí que está mosqueando a Roma? La niñita rebelde pidió ayuda en una carta al rey de los Hunos en la que uuups, también metió un anillo, prometiéndole así ser su esposa y nada más y nada menos que ¡¡¡la mitad del Imperio Romano!!!
Cuando su hermano el emperador Valentiniano III se la montó -debió de montarse muy gorda- Honoria le dijo que no... que Atila le había entendido mal y no le había ofrecido matrimonio... que lo del anillo fue sin querer… en fin, no me hubiera gustado ser la Supernanny dando consejos en esa escena. Su madre, Gala Placidia intercedió por ella para que su hermano no la matase -a diferencia de muchas broncas familiares, esto iba en serio- y sólo la mandó al exilio.
El tema no acabó ahí, porque Atila, dos años después de este incidente seguía erre que erre reclamando la mano de su prometida y su parte del Imperio y llegó hasta la misma puerta de Roma. No llegó a entrar y no se sabe muy bien por qué, pero como diría Michael Ende, esto ya es otra historia.
15 agosto, 2007
CORAZÓN DE LEÓN?
Siempre he pensado en él como ese rey noble que sale en Robin Hood mientras su terrible hermano Juan cobra impuestos a los pobres hombres felices del bosque. Hoy me he dado cuenta de algo: no sale en toda la peli. Antes no le había dado importancia, pero acabo de enterarme que no es que el rodaje le pillara fuera, sino que en los 10 años que estuvo reinado la vieja Albion (1189-1199) ¡tan sólo pasó 6 meses en Inglaterra! Nada, que al tipo le encantaba guerrear y se tiró casi todo su reinado en las cruzadas. Ha de decirse que las cruzadas eran bastante caras y por eso su hermano tenía que recaudar impuestos.
Su nombre de Corazón de León, parece que hacía más referencia a su pelo -melena rubia al viento- que al órgano en sí. ¿Por qué le quieren tanto los ingleses? Este tipo ni siquiera hablaba inglés ya que su familia y gran parte de su corte era francesa, y él mismo fue educado en Francia. Se enfrentó con su padre para ser rey de los ingleses y cuando lo consiguió ¡práticamente pasó de su pueblo!
Cuando atravesó toda Europa para echar a Saladino de Jerusalén (era la 3ª cruzada), Saladino le ofreció pactar antes de liarse a tirar flechas: Mira, yo dejo que los cristianos peregrinéis a Jerusalén, dejamos la ciudad abierta y os cedo un paso desde el mar hasta la ciudad para que no tengáis problemas. Pero Ricardito (llamemosle el primer hooligan) tenia ganas de liarse a mamporros y ahí estuvo, dale que dale hasta que su ejército no pudo más y terminaron por contar a la cristiandad que bueno, conquistar, lo que se dice conquistar no habían podido porque los moros eran muchos y muy malos, pero que gracias a la dura lucha y sacrificio del ejército que guió Ricardito, Jerusalén podía ser visitada a través de un paso desde el mar.
Su vida personal tampoco fue modélica. Se casó con Berenguela de Navarra en Chipre. Puede sonar muy romántico, pero es que fue el único trozo de tierra que conquistó mientras intentaba llegar a Jerusalén. A "la Bere" la había visto una vez, dos años antes, y pidió que la llevasen hasta Chipre para casarse. "La Bere" estaba super enamorada, pero aún no está claro si llegaron a consumar, porque al parecer a Ricardito le iban más los soldaditos. Apenas estuvieron juntos un año, y no volvieron a verse más. Y eso a pesar de que a la vuelta de las cruzadas, Ricardito estuvo preso del emperador germánico y la "Bere" se tiró meses en Francia intentando juntar el dinero para pagar el rescate. Al final el rey Francés le hizo condesa de Maine y le dio el señorio de Le Mans para poder vivir. Aparte de darle un poco de pena, Francia iba a necesitar ayuda de Navarra y tenía que caer bien a la familia.
La muerte de Ricardo nos explica por qué durante siglos, los trovadores le cantaron como un hombre noble y justo. El trágico acontecimiento tuvo lugar tras su liberación, en Inglaterra, mientas estaba entrenando a sus soldaditos para volverse a la guerra. Ricardito miraba a sus tiernos infantes mientras practicaban el tiro con arco y una de las flechas fue a parar a su hombro, se gangrenó y Ricardito murió. El autor del disparo había sido un niño. Cuando llevaron a la criatura ante el rey herido, el crio dijo que lo había hecho por venganza, porque el rey había matado a su padre y a dos de sus hermanos. Ricardito, a las puertas de encontrarse con San Pedro perdonó al crio.
Queda claro que se trata de la historia del tipo chungo que hace una cosa buena antes de morir y queda redimido. Lo hemos visto en Darth Vader de "La Guerra de las Galaxias" y en tantas otras. Ricardo I perdonó a un niño, pero mató a 2700 prisioneros musulmanes porque le molestaban para avanzar hacia Jerusalén, en las negociaciones para acabar la guerra contra Saladino ofreció a su hermana como esposa al moncarca sarraceno, y dicen que cuando estuvo enfermo de escorbuto, pasaba el tiempo matando guardias con su ballesta desde una camilla.
Por si queréis saber cómo acaba de verdad su historia, cuando la gangrena terminó por matarle, los capitanes de Ricardito apresaron al niño lo despellejaron vivo y lo colgaron. Qué majos. Los finales de Hollywood siempre nos han gustado. Eso sí, si a los ingleses les cae bien su rey, "todo pa'ellos".